
Sin la implantación de sensores en las turbinas eólicas, éstas serían menos seguras, más costosas de operar, impidiendo así mismo el predecir con precisión la aparición de fallos inminentes. Esto conllevaría el tener una vida útil inferior a los veinticinco años que se espera que operen. Lo más importante, es que los parques eólicos necesitan datos precisos sobre cada turbina y sus componentes más importantes, que sólo pueden ser proporcionados por sensores conectados entre sí, y conectados a un centro de comando.
Los aerogeneradores son un ejemplo clásico (aunque poco convencional) de IoT industrial en acción: tienen todos los ingredientes necesarios, desde los sensores para turbinas eólicas hasta las redes que los conectan, aunque estas redes son normalmente Ethernet y no inalámbrica. Una red de parques eólicos IoT puede aprovechar los beneficios de los datos operativos históricos de sus aerogeneradores, como velocidad del viento, potencia, ángulos de cabeceo de las palas, temperatura de la caja de cambios y otras medidas para analizar las tendencias de funcionamiento. A partir de esto, los operadores pueden crear un modelo que pueda predecir qué componentes inspeccionar y cuándo. Toda la información, así como las alertas de estado y otros resultados de la supervisión, se pueden ver y analizar para poder tomar las acciones pertinentes desde cualquier lugar, tan sólo usando un smartphone, una tablet o un ordenador.
Las turbinas eólicas son complejas y, por lo general, tienen más de 8,000 componentes. Sus enormes palas y estructuras de torre están ancladas a plataformas hechas de miles de toneladas de acero y barras de refuerzo, que miden de 30 a 15 m de ancho, y de 6 a 10 m de profundidad.
La tecnología de los sensores proporciona un gran potencial de optimización para los aerogeneradores. El uso de métodos de prueba modernos proporciona una alta calidad y un funcionamiento confiable. Por lo tanto, los sensores se utilizan cada vez más para el desarrollo, producción y operación de turbinas eólicas.
Una aspecto de optimización que se viene realizando es mediante el uso de sensores de desplazamiento. Este sistema de sensores es fundamental en una turbina eólica, ya que el movimiento de la góndola y los rotores se realiza de manera automática y, por lo tanto, debe medirse.
Hay muchos tipos diferentes de sensores utilizados en las turbinas eólicas. En general, ellos detectan, monitorizan y comunican información sobre parámetros, tales como:
- Cambios en la distancia entre dos componentes cerca uno del otro
- Medición del desplazamiento del disco de embrague
- Medición del espacio de lubricación del eje y su apoyo
- Medición de la separación del rotor
- Control de los niveles de vibración que, si son excesivos, pueden causar daños importantes
- Controlar los cambios en la temperatura en la caja de cambios, la presión y las tensiones mecánicas
El siguiente video muestra de manera gráfica la utilización de sensores de posición y desplazamiento en aerogeneradores: